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Mientras el mundo avanza hacia un futuro eléctrico, algunas de las cadenas minoristas más grandes de Estados Unidos están pisando el acelerador… literalmente. Walmart, Costco y Dollar General están invirtiendo fuertemente en estaciones de servicio, desafiando la narrativa de que la gasolina está por desaparecer. Pero, ¿qué hay detrás de esta estrategia aparentemente contradictoria?
Una jugada estratégica en medio del cambio
Aunque los autos eléctricos están ganando terreno, la realidad es que el mundo aún funciona a gasolina. La infraestructura de carga aún no es suficiente, y la transición completa podría tardar décadas. Según Joe Camberato, CEO de NationalBusinessCapital.com, «todavía hay mucho dinero por ganar en el negocio del combustible».
Y los gigantes minoristas lo saben.
- Walmart abrirá más de 45 nuevas estaciones de servicio este año, alcanzando más de 450 ubicaciones en 34 estados. Además, ofrece descuentos de hasta 10 centavos por galón a miembros de Walmart+.
- Costco ha ampliado los horarios de atención de sus estaciones de gasolina exclusivas para socios, ahora abiertas hasta las 10 p.m. en muchas ubicaciones.
- Dollar General, por su parte, comenzó con un piloto en Alabama y ya suma más de 40 estaciones en el sur de Estados Unidos.
Más allá del combustible: fidelización, comodidad y visión a futuro
Agregar estaciones de servicio no solo significa vender combustible. Se trata de atraer clientes, fomentar la fidelidad y aumentar la frecuencia de visitas. Usha Haley, experta en estrategia internacional, destaca que Walmart está replicando el éxito de Costco, donde el combustible representa un 12% de sus ventas totales.
Además, las estaciones pueden transformarse con el tiempo. Muchos analistas anticipan que las bombas de gasolina eventualmente serán reemplazadas por cargadores de autos eléctricos. Como señala Manish Choudhary, CEO de SymphonyAI, «el tiempo promedio para cargar un EV es mucho mayor que llenar un tanque, y eso representa una gran oportunidad para atraer al cliente dentro de la tienda».
Gasolina como escudo ante la inflación y los aranceles
Ante aranceles y la volatilidad del mercado, las estaciones de combustible funcionan como un escudo. Walmart ha reconocido que podría trasladar el costo de los aranceles a los consumidores, pero el ingreso por ventas de gasolina podría compensar esas pérdidas.
Además, en un contexto donde el consumidor busca conveniencia y buenos precios, tener la posibilidad de llenar el tanque y hacer las compras semanales en un solo lugar se convierte en una ventaja competitiva.
Conclusión: ¿una estrategia retro o una apuesta al futuro?
A simple vista, expandir estaciones de gasolina puede parecer una jugada retro, pero es, en realidad, una inversión estratégica en el presente… y en el futuro. Mientras las ventas de autos eléctricos crecen lentamente, las grandes cadenas se preparan para mantener su relevancia en un mundo en transición. Y si logran convertir cada parada por gasolina o electricidad en una visita al supermercado, habrán ganado la carrera antes de que empiece.
