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Las ventas de viviendas unifamiliares nuevas cayeron drásticamente en octubre, alcanzando su nivel más bajo en casi dos años. Esta caída refleja el impacto combinado de tasas hipotecarias elevadas, huracanes y precios de viviendas en aumento, que continúan afectando la actividad del mercado inmobiliario.
Una caída significativa en las ventas
Según datos de la Oficina del Censo de los Estados Unidos, las ventas de nuevas viviendas disminuyeron un 17.3% en octubre en comparación con el mes anterior, situándose en una tasa ajustada estacionalmente de 610,000 unidades. Este nivel está muy por debajo de las expectativas de los analistas, quienes habían proyectado un ritmo de 725,000.
Los huracanes Helene y Milton jugaron un papel importante en esta desaceleración, particularmente en el sur de los Estados Unidos, donde las ventas disminuyeron un 28%, marcando el ritmo más lento desde abril de 2020.
Nancy Vanden Houten, economista principal de Oxford Economics, señaló:
«Esperamos que las ventas se recuperen en los próximos meses a medida que comience la reconstrucción en el sur.»
Tasas hipotecarias y precios en ascenso
El aumento de las tasas hipotecarias continúa presionando el mercado inmobiliario. Durante octubre, la tasa promedio de hipotecas fijas a 30 años se mantuvo en torno al 6.8%, dificultando que los compradores accedan a financiamiento asequible. Esto, combinado con el incremento en el precio medio de venta de viviendas, que subió a $437,300, ha reducido aún más la demanda.
Colin Johanson, analista macroeconómico de Barclays, explicó:
«Las ventas de nuevas viviendas reflejan de manera más inmediata los efectos de las tasas hipotecarias en comparación con las ventas de viviendas existentes, que se miden en el momento del cierre.»
Impacto económico y perspectivas para 2025
La incertidumbre económica, impulsada por la victoria presidencial de Donald Trump y el debate sobre futuras decisiones de la Reserva Federal, también afecta la confianza de los compradores. Aunque el mercado esperaba recortes de tasas de interés para diciembre, ahora hay una probabilidad creciente de que estos no ocurran tan pronto, lo que podría prolongar la presión sobre el mercado inmobiliario.
Los constructores, por su parte, han adoptado estrategias para mantener la asequibilidad. Paul Romanowski, CEO de DR Horton, comentó que esperan «mantener incentivos elevados para garantizar pagos mensuales accesibles» para los compradores.
Vanden Houten añadió:
«Para 2025, anticipamos una leve mejora en las ventas de viviendas nuevas basada en nuestra previsión de un pequeño y gradual descenso en las tasas hipotecarias.»
Conclusión
El mercado de viviendas nuevas enfrenta un panorama desafiante con múltiples factores que afectan tanto la oferta como la demanda. Aunque las estrategias de los constructores y un posible descenso gradual en las tasas hipotecarias podrían ofrecer alivio en el futuro, el corto plazo parece marcado por la incertidumbre económica y los costos elevados.
