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La industria automotriz mexicana, uno de los pilares del aparato exportador nacional, registra su segundo mes consecutivo de contracción en producción y exportaciones. Aunque el primer trimestre del 2025 fue positivo y permitió a muchas armadoras fortalecer inventarios, los datos de abril y mayo revelan una tendencia a la baja que inquieta a fabricantes, analistas y autoridades económicas.
Cifras que preocupan: Inegi reporta retrocesos
Durante mayo de 2025, se ensamblaron 358,209 vehículos ligeros en México, lo que representa una disminución del 2% frente al mismo mes del año anterior. En el mismo periodo, se exportaron 301,112 unidades, un retroceso del 2.9% anual, según cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Este descenso se suma a las caídas registradas en abril, consolidando una tendencia negativa que podría impactar las metas de producción y exportación anuales del sector automotor.
¿Qué hay detrás de la caída?
El primer trimestre del año fue dinámico debido a un adelanto de embarques, principalmente hacia Estados Unidos, como medida preventiva ante los cambios en las políticas arancelarias impulsadas por el gobierno de Donald Trump. Esta estrategia dejó altos niveles de inventario en los distribuidores norteamericanos, lo que, junto al inicio del cobro de nuevos aranceles, ha provocado una desaceleración en los envíos.
El resultado es claro: entre enero y mayo de 2025, la producción acumulada cayó un 0.5% (1,645,673 unidades), mientras que las exportaciones descendieron 6.3% (1,334,667 vehículos enviados al extranjero).
El dominio de las pickups y el ajuste en otros segmentos
Las pickups continúan siendo la columna vertebral de la producción automotriz mexicana, representando el 76.6% del total. Sin embargo, otros segmentos muestran señales de debilitamiento. Modelos como los sedanes y las SUV subcompactas han visto caer su demanda internacional, lo que ha obligado a varias armadoras a recortar su producción.
Volkswagen, por ejemplo, redujo sus exportaciones en un alarmante 37.6% en lo que va del año. Stellantis también presenta una contracción del 27.2% y Mazda un 34.9%.
Toyota, Kia y Ford: las excepciones a la regla
En medio de este contexto adverso, algunas marcas han logrado crecer. Toyota ha destacado con un incremento del 63.4% en su producción anual y un impresionante 72% en exportaciones. Kia también se mantiene firme, con un alza del 14% en sus envíos internacionales.
Ford Motor, tras un año 2024 complicado, está mostrando signos de recuperación: su producción subió 8.2% y sus exportaciones un 7.2%.
Estas empresas han apostado por la diversificación de mercados, modernización de sus líneas de producción y estrategias logísticas más flexibles, lo que les ha permitido enfrentar mejor los cambios en la demanda global.
Mercado interno: estable pero moderado
Mientras tanto, el mercado mexicano de autos nuevos ha mostrado cierta estabilidad. Entre enero y mayo, las ventas crecieron un leve 0.95%, alcanzando las 593,282 unidades. Sin embargo, mayo cerró con una pequeña baja del 0.4%.
Un factor que podría complicar el análisis en los próximos meses es la exclusión de marcas como Chirey y Omoda del reporte oficial de la AMDA, lo que limitará las comparaciones interanuales completas.