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En un año marcado por decisiones estratégicas y una ejecución firme, General Motors (GM) logró sorprender a sus inversores, posicionándose como un referente en la industria automotriz y enfrentando el complejo camino hacia la electrificación. Bajo el liderazgo de Mary Barra, GM superó expectativas y preparó el terreno para 2025, un año que promete desafíos, incluyendo políticas comerciales inciertas y la transformación hacia los vehículos eléctricos (EV).
Un año de ejecución y resultados positivos
Mary Barra, CEO de GM, calificó 2024 como «el año de la ejecución». La compañía logró mejorar sus resultados financieros gracias a tres factores clave:
- Adopción exitosa de nuevos modelos: Vehículos como el Chevy Trax y el EV Cadillac Lyriq tuvieron una excelente acogida en el mercado, consolidando la apuesta por combinar autos a gasolina con modelos eléctricos.
- Reducción de costos: Las eficiencias operativas permitieron mayores márgenes de ganancia, a pesar del aumento en costos laborales tras un nuevo acuerdo con el sindicato UAW.
- Recompra de acciones: GM utilizó su sólida posición de efectivo para recomprar $2.4 mil millones en acciones, un claro mensaje de confianza en el valor a largo plazo de la compañía.
Como resultado, las acciones de GM avanzaron un 47% en 2024, superando tanto a Ford (-14%) como al S&P 500 (+26%).
EVs y el futuro de GM
A pesar del optimismo, GM aún enfrenta desafíos con su división de vehículos eléctricos. La compañía ha suavizado su ambicioso objetivo de ser 100% eléctrica para 2035, optando por una estrategia más centrada en las demandas del consumidor.
Barra comentó: “Queremos darle a los consumidores opciones sobre lo que quieren manejar.”
Entre las decisiones clave en 2024:
- Venta de su participación en una planta de baterías EV en Lansing, Michigan.
- Retraso en el lanzamiento de un nuevo vehículo eléctrico Buick.
Estas medidas buscan reducir pérdidas en el segmento eléctrico y asegurar que las inversiones generen retornos positivos a largo plazo.
Decisiones difíciles y el panorama para 2025
Para continuar su éxito, GM tomó decisiones complicadas en mercados clave:
- Reestructuración en China: La empresa asumirá un cargo de $5 mil millones para optimizar su operación en el país asiático, donde ha perdido participación frente a competidores locales.
- Cierre de Cruise, su negocio de robotaxis: Tras invertir $10 mil millones en Cruise, GM decidió fusionarlo con su equipo interno de software de conducción autónoma, enfocándose en tecnologías más rentables a corto plazo.
Estas acciones preparan a GM para los retos que podrían surgir bajo el mandato del presidente electo Donald Trump, quien ha propuesto aranceles del 25% a productos importados desde México y Canadá, dos regiones clave para la producción de GM.
Barra comentó al respecto: “Los aranceles tendrán un impacto en precios y demanda, pero confío en que la nueva administración tomará decisiones en beneficio del consumidor estadounidense.”
Expectativas de los inversores y valoración de la acción
A pesar del sólido desempeño de GM en 2024, las acciones de la compañía todavía se negocian a una valoración baja, con un múltiplo precio-ganancias (P/E) de 4.9 veces, comparado con el 23x del S&P 500 y el 126x de Tesla.
Analistas como John Murphy de Bank of America se muestran optimistas, destacando que GM tiene un portafolio de productos «imbatible», especialmente sus pickups y SUVs, que podrían impulsar un crecimiento significativo para 2027-2028.
