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Un exempleado de Disney ha sido acusado de hackear los servidores de Walt Disney World para manipular menús en los sistemas de la compañía. Según la denuncia penal federal, el exempleado modificó precios, agregó insultos y alteró notificaciones para declarar erróneamente algunos artículos como seguros para personas con alergias, una acción que potencialmente ponía en riesgo la salud de los clientes.
El acusado, arrestado la semana pasada tras una investigación del FBI, enfrenta cargos graves. Su abogado de oficio, David Haas, ha declarado que su cliente se declarará no culpable cuando se presente la acusación formal. Por ahora, el exempleado permanece en prisión hasta al menos su audiencia de fianza, programada para la próxima semana.
Problemas de salud mental y situación judicial
Haas destacó que su cliente ha tenido problemas de salud mental desde la infancia y actualmente está bajo el cuidado de un psiquiatra. En una moción para su liberación, el abogado señaló la necesidad urgente de apoyo y tratamiento de salud mental, ya que no está recibiendo ningún tipo de asesoramiento o terapia en la cárcel.
Disney identifica y controla el ataque
Disney, que prefirió no comentar sobre el caso, detectó las alteraciones antes de que los menús fueran enviados a sus restaurantes. Sin embargo, el incidente causó una interrupción significativa, ya que la compañía tuvo que desactivar su sistema de creación de menús por más de una semana, generando un costo estimado de al menos $150,000. Entre las alteraciones realizadas por el exempleado se encontraban etiquetas que indicaban erróneamente que algunos alimentos eran seguros para personas con alergias, lo que podría haber provocado graves consecuencias de salud para los clientes con sensibilidades alimenticias.
Investigaciones internas y sospechas fundadas
La investigación interna de Disney determinó que el exempleado, quien había sido despedido de su puesto como gerente de producción de menús en junio pasado, era un posible sospechoso. El despido fue descrito como “contencioso” y “no amigable”. Además, el rol del exempleado le otorgaba acceso completo y conocimientos sobre el sistema de creación de menús, lo que hacía probable su implicación en el hackeo.
El exempleado negó haber cometido algún delito cuando agentes del FBI registraron su casa el mes pasado, aunque las pruebas y el conocimiento detallado de los sistemas de Disney lo colocan como el principal sospechoso.
Reflexión sobre la ciberseguridad y la confianza en los empleados
Este incidente subraya la importancia de la ciberseguridad en grandes corporaciones y destaca los riesgos asociados a la confianza en empleados con acceso a sistemas críticos. Además, pone de manifiesto la necesidad de un soporte adecuado en salud mental para empleados en entornos de alta presión y las consecuencias que pueden derivarse cuando no se proporcionan los recursos necesarios.
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