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El accidente de un avión Boeing 737-800 operado por Jeju Air en Corea del Sur ha generado una nueva ola de preocupación para el gigante aeronáutico. Este suceso, ocurrido en el Aeropuerto Internacional de Muan, cobró la vida de 179 personas de los 181 pasajeros y tripulantes a bordo, marcando otro desafortunado episodio en la historia reciente de Boeing.
El accidente: Lo que sabemos hasta ahora
El avión, con 15 años de antigüedad, se estrelló al sobrepasar la pista de aterrizaje. Según las primeras investigaciones, hay dos factores principales bajo revisión:
- Impacto con aves: El piloto emitió un llamado de emergencia minutos después de que la torre de control advirtiera sobre el riesgo de colisión con aves.
- Fallo en el tren de aterrizaje: Imágenes del accidente muestran que el tren de aterrizaje no se desplegó, lo que apunta a un posible fallo mecánico.
Aunque estas teorías siguen siendo investigadas por las autoridades coreanas y organismos internacionales como la FAA y la NTSB, los analistas han señalado que es poco probable que el accidente esté relacionado con defectos de fabricación iniciales, dado el extenso historial de mantenimiento de la aeronave.
Impacto en Boeing
El accidente llega en un momento delicado para Boeing, una empresa que ha estado tratando de recuperarse de una serie de crisis recientes:
- Los accidentes del 737 MAX (2018-2019): Dos accidentes mortales que llevaron a la inmovilización global del modelo por casi dos años.
- Incidentes técnicos en 2024: Incluyendo la expulsión de un tapón de puerta en pleno vuelo y problemas internos de liderazgo.
Tras el accidente en Corea del Sur, las acciones de Boeing cayeron un 6%, continuando su mal desempeño en 2024, donde acumulan una pérdida del 34% en lo que va del año.
Implicaciones para la industria
Este nuevo accidente no solo afecta a Boeing, sino que también pone bajo escrutinio la seguridad en la aviación en general. La confianza de las aerolíneas y pasajeros podría verse afectada, y los reguladores de todo el mundo probablemente aumentarán los controles sobre los aviones de este modelo.
Por otro lado, los posibles fallos mecánicos y operativos también resaltan la importancia del mantenimiento continuo y las inspecciones rigurosas, especialmente en aeronaves con más de una década en operación.
El futuro de Boeing
Aunque el modelo 737-800 tiene un historial operativo sólido, este incidente subraya los desafíos que enfrenta Boeing para restaurar su reputación. El informe final de las investigaciones será crucial para determinar si el accidente fue causado por un error técnico, un factor externo o una combinación de ambos.
Para los inversores, la incertidumbre persiste, ya que cualquier hallazgo que vincule el accidente a un defecto de diseño o fabricación podría tener graves consecuencias para la empresa.