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La propuesta de Donald Trump de implementar aranceles universales del 10% (o posiblemente del 20% o incluso del 50%) está generando preguntas sobre quiénes podrán evadir estas llamadas tarifas «generales». Aunque el ex presidente ha sugerido que habrá algunas excepciones, parece que estas opciones podrían ser más numerosas para las grandes empresas.
Trump ha mencionado en varias ocasiones que los CEO de importantes compañías tienen una línea directa para presentar su caso, pero la situación para las pequeñas empresas que dependen de importaciones es mucho más incierta.
«Oh, tenemos excepciones,» dijo Trump recientemente en Chicago, aunque su respuesta dejó entrever que las grandes corporaciones podrían tener más posibilidades de evitar los aranceles.
El desafío para las pequeñas empresas
Para propietarios de pequeñas empresas como Tina Wells, que ha gestionado múltiples empresas de belleza y bienestar, las políticas arancelarias de Trump representan un gran desafío. Durante su mandato anterior, Wells experimentó de primera mano las dificultades de evitar las tarifas, lo que le generó pérdidas considerables.
«Perdí mi margen de ganancia y tuve que destruir el producto,» comenta Wells. Ella recuerda cómo los aranceles impuestos durante la administración anterior afectaron directamente sus operaciones comerciales, y ahora teme que una nueva ronda de aranceles en 2025 podría ser aún más perjudicial para las pequeñas empresas que dependen de la manufactura en el extranjero.
Wendy Edelberg, directora del Hamilton Project en la Brookings Institution, advierte que aunque es probable que exista algún proceso para otorgar excepciones, en el pasado estas han estado más relacionadas con la realidad política de las empresas más grandes que con los méritos de cada caso. Esto podría significar que las pequeñas empresas, sin acceso político, enfrenten más dificultades para obtener esas excepciones.
Trump y las grandes corporaciones: Una relación diferente
Durante sus recientes apariciones públicas, Trump ha dejado claro que algunas grandes empresas, como Apple, podrían tener más opciones de evitar los aranceles gracias a su acceso directo. En un discurso reciente ante el Economic Club of Chicago, mencionó cómo el CEO de Apple (AAPL), Tim Cook, lo visitó durante su mandato para solicitar con éxito una excepción arancelaria.
Esta anécdota destaca una realidad incómoda para muchas pequeñas empresas: las grandes corporaciones tienen la influencia necesaria para presentar su caso directamente a los líderes políticos, mientras que las pequeñas empresas podrían no contar con las mismas oportunidades.
Un futuro incierto para las pequeñas empresas
La preocupación de los pequeños empresarios, como Wells, es que no tengan el mismo acceso a esas excepciones. A pesar de que Trump asegura que las excepciones se otorgarán basadas en los méritos, la falta de acceso político podría significar que muchas pequeñas empresas, que ya operan con márgenes ajustados, tengan que absorber los costos adicionales o enfrentar serias dificultades.
Por ahora, Trump ha evitado responder directamente sobre cómo su propuesta de aranceles afectará a las pequeñas empresas y qué tipo de excepciones podrán solicitar.
Conclusión
Si Trump es elegido nuevamente en 2025, las políticas arancelarias podrían impactar de manera desproporcionada a las pequeñas empresas que dependen de las importaciones extranjeras. Aunque algunas grandes corporaciones como Apple podrían tener opciones para evitar los aranceles, los pequeños negocios podrían quedar atrapados en la incertidumbre. Queda por ver cómo se desarrollará esta situación y si se otorgarán excepciones de manera justa y equitativa para todos.
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