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Akio Toyoda, nieto del fundador de Toyota y una de las figuras más influyentes en la industria automotriz global, fue reelegido este jueves como presidente de Toyota Motor en la junta general anual de accionistas. Esta ratificación se produce en un momento particularmente delicado para la compañía, debido a las críticas generadas por la oferta de compra de Toyota Industries, valorada en 33,000 millones de dólares, que algunos inversionistas consideran injusta.
Aunque el resultado oficial del voto aún no ha sido publicado, el diario japonés Nikkei estima que Toyoda obtuvo al menos el 96% de apoyo, una cifra significativamente mayor que el 72% registrado el año pasado, que fue la más baja en la historia reciente de la empresa para un directivo de su nivel.
Apoyo mayoritario pese a tensiones
A diferencia de años anteriores, las principales firmas de asesoría de voto, como Glass Lewis e ISS (Institutional Shareholder Services), no recomendaron votar en contra de Toyoda. Esta decisión marca un giro importante, considerando que ambos asesores habían señalado preocupaciones de gobernanza en votaciones pasadas.
Los accionistas extranjeros, sin embargo, no han dejado de manifestar sus dudas sobre la operación para adquirir Toyota Industries. Consideran que la transacción favorece a la familia fundadora y perjudica a los inversionistas minoritarios, ya que el precio ofrecido por acción —16,300 yenes— estaría por debajo del valor real de la empresa.
Un acuerdo que refuerza el control familiar
Toyota Motor busca privatizar Toyota Industries, conocida originalmente como Toyoda Automatic Loom Works, con el objetivo de fortalecer las sinergias internas del grupo y avanzar hacia una visión más integrada de movilidad. Como parte del acuerdo, Akio Toyoda invertirá personalmente 1,000 millones de yenes, un gesto que ha sido interpretado como un intento de reafirmar su compromiso con la compañía y sus accionistas.
La estrategia busca consolidar la estructura del grupo y reducir la presión por resultados financieros de corto plazo, lo que podría facilitar la innovación tecnológica y la expansión en áreas como la electrificación y los vehículos autónomos.
Un legado que enfrenta desafíos
Desde que asumió el liderazgo de Toyota, Akio Toyoda ha guiado a la compañía a través de múltiples transformaciones, incluyendo su adaptación al cambio climático y a las nuevas demandas del mercado automotriz. Sin embargo, también ha enfrentado críticas por la lenta adopción de tecnologías eléctricas y por cuestiones de transparencia en la gobernanza.
En entrevistas recientes, Toyoda ha reconocido que el respaldo de los accionistas no debe darse por sentado. “Estoy dispuesto a dejar mi puesto si siento que he perdido la confianza”, afirmó el año pasado. Hoy, con una mayoría sólida, parece haber recuperado esa confianza.
El futuro de Toyota en manos de su linaje
La decisión de continuar con Toyoda al mando no solo habla de la estabilidad en la cima del grupo automotriz más poderoso de Japón, sino también del respaldo continuo a un modelo corporativo que mezcla tradición, visión familiar y adaptabilidad global.
Mientras Toyota continúa avanzando hacia su transformación en una empresa de soluciones de movilidad, los ojos del mundo seguirán puestos en las decisiones de su presidente, cuyo legado se forja en un entorno cada vez más competitivo y exigente.