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En 2025, la inteligencia artificial (IA) no solo seguirá revolucionando sectores como la tecnología, la salud y la industria, sino que también se convertirá en un impulsor clave de la demanda energética global. En este escenario, el gas natural se perfila como una de las principales fuentes de energía, especialmente para alimentar centros de datos y garantizar un suministro energético constante.
El papel del gas natural en el auge de la IA
La IA depende de enormes centros de datos que operan 24/7, lo que genera un aumento significativo en la demanda de energía eléctrica. Según Bank of America, se espera que el consumo energético de estos centros crezca entre un 10% y 15% anualmente hasta 2030. Para 2030, los centros de datos podrían representar hasta el 5% de la demanda energética global.
El gas natural, que actualmente genera entre el 40% y 45% de la electricidad en Estados Unidos, es ideal para satisfacer esta creciente demanda debido a su capacidad para generar energía de manera eficiente y constante.
Proyecciones optimistas para el gas natural en 2025
Aunque en 2024 los precios del gas natural cayeron un 13% debido a inviernos moderados y un exceso de oferta, se prevé un repunte significativo en 2025. La creciente demanda de exportaciones de gas natural licuado (LNG, por sus siglas en inglés) y el uso de gas para alimentar plantas eléctricas impulsarán los precios.
- Exportaciones de LNG: Se espera que aumenten un 15% en 2025, impulsadas por la creciente demanda de Europa para reducir su dependencia de Rusia en medio de la guerra en Ucrania.
- Precios futuros: Según S&P Global Commodity Insights, los precios del gas natural en el Henry Hub podrían superar los $4.00 por MMBtu en 2025, después de promediar menos de $3.00/MMBtu durante dos años.
El gas natural: «El combustible del futuro»
Empresas como GE Vernova están aumentando sus proyecciones para las turbinas de gas, destacando su importancia en la generación de electricidad en Estados Unidos y el mundo. A medida que países en desarrollo migren del carbón al gas natural, su papel en la transición energética global será aún más destacado.
Según Dennis Kissler de BOK Financial, el gas natural será clave para construir la infraestructura energética necesaria para soportar el auge de la IA y otras tecnologías avanzadas.
Desafíos y posibles retrasos
A pesar del optimismo, algunos analistas señalan que los cambios en las políticas de exportación y los retrasos en proyectos de LNG podrían moderar el alza de los precios. Goldman Sachs, por ejemplo, proyecta que el gas natural alcance los $4/MMBtu hasta 2026, en lugar de finales de 2025 como se había previsto.
Conclusión
La creciente demanda energética impulsada por la IA, junto con el aumento de las exportaciones de gas natural licuado, coloca al gas natural en el centro del panorama energético de 2025. Este combustible no solo será clave para garantizar un suministro energético eficiente y constante, sino que también desempeñará un papel fundamental en la transición energética global.
